Las universidades de ciencias médicas cubanas tienen como reto la formación integral del personal de pregrado, con la intención de lograr un profesional capacitado en todas las esferas, donde la investigación científica desempeña un importante rol.¹

En el pregrado los estudiantes de las ciencias de la salud son influenciados por profesores y otros estudiantes para la realización de actividades científicas. Ejemplo de ello lo constituye la Revista 16 de Abril la cual celebra sus 61 años de publicada y que, junto a la revista Universidad Médica Pinareña, eran las únicas de su tipo en Cuba.

Actualmente existen 15 revistas médicas estudiantiles patrocinadas por cada una de las universidades provinciales, asesoradas por Ecimed y por los centros de información científica de los territorios, en donde existen, además, revistas académicas dedicadas a los profesionales. Estas surgieron en respuesta al reclamo de los estudiantes de todas las universidades médicas del país en el IX Congreso de la Federación Estudiantil Universitaria, por la necesidad de espacios para la publicación científica.²

Gaceta Médica Estudiantil (GME) surgió en el año 2020 en la Universidad de Ciencias Médicas de Guantánamo, bajo la dirección del estudiante Alejandro Sánchez García, la que desde sus inicios fue asesorada por los colegas de Revista de Información Científica (RIC), tomando como referencia las políticas y las buenas prácticas editoriales de RIC. Hablamos de RIC, revista de referencia nacional, demostrado por sus indexaciones, alcance y posicionamiento.

Se podría decir que GME es “hijo” inseparable de RIC, pues ella transmite desde su longevidad a la juventud su experiencia y calidad en el ámbito de gestión editorial, lográndose así que GME diera sus primeros pasos desde sus inicios con excelente calidad y aceptación por el público.

Los resultados actuales de la revista GME en materia de indexación en los últimos dos años (46 bases de datos, destacando DOAJ, Latindex y CAB Abstracts) y el aumento vertiginoso y continuo de las descargas y visualizaciones de los artículos publicados, son ejemplo de la influencia paternalista con que acoge RIC a GME.

“Paternidad” sustentada bajo una misma universidad, territorio y país, demostrando al mundo ciencia única desde el pregrado al posgrado. Esto indica que los jóvenes podemos hacer ciencia de calidad atemperada a las demandas de salud de la población en general, siempre bajo el seguimiento de un ejemplo competente y preparado como significa RIC para GME.

La revista GME constituye hoy cantera de personal adiestrado para RIC debido a que los estudiantes del equipo editorial de GME son capacitados mediante cursos, fórum-debate y talleres emprendidos por RIC; en estos espacios se refleja de forma natural el trabajo del tutor o sea RIC con el tutelado GME para alcanzar una sola meta: el perfeccionamiento editorial.

GME como cantera para RIC permite un tránsito ininterrumpido del profesional de la salud hacia la gestión, producción y divulgación de la ciencia, creando hábitos, costumbres y enseñanzas en la divulgación de los resultados encontrados en su práctica habitual como futuro profesional. Renueva la plantilla editorial de la RIC sin crear grandes estragos y procesos prolongados de capacitación para nuevos integrantes, pues llegan a RIC con la experiencia de GME. Es decir, RIC garantiza a GME conocimiento, experiencia y guía, en cambio GME responde a RIC con juventud, relevo y sostenibilidad.

El equipo editorial de GME espera poder contar con su “padre” de por vida, de continuar el perfeccionamiento diario de la gestión editorial en ambas revistas y demostrar al mundo la calidad científica que las rige, que sean capaces de visualizar a las revistas estudiantiles como canteras y formadoras de profesionales competentes para las revistas profesorales.

No se puede concebir la idea de que en una misma universidad dos revistas: por un lado, la estudiantil y por otro lado la profesoral, estén “divorciadas”.

Debido al desarrollo científico-técnico con que avanza el mundo, se demanda de profesionales con mayor preparación y destreza que en tiempo anteriores, y para que una revista académica se adapte a estas circunstancias es necesaria la cantera, donde los estudiantes pertenecientes al equipo editorial de GME siempre trataremos de estar actualizados para responder a RIC.

A todo el equipo editorial de RIC que hace posible que podamos contar hoy con una revista estudiantil competente, de alta calidad, con excelente rigor científico demostrado desde su fundación, el equipo editorial de GME les agradece por su grandeza humana, su incalculable aporte al desarrollo científico, por el sentido de pertenencia y por el tiempo mostrado para enseñar y aprender de los jóvenes.

Exhortar a las Instituciones de educación médica de la salud a desarrollar estrategias de trabajo en conjunto con sus revistas estudiantiles y académicas para contribuir a posicionar la ciencia cubana en los altos niveles de la ciencia mundial.